martes, 31 de enero de 2012

BENDECIR






"Bendecir significa desear y querer incondicionalmente el bien ilimitado"
“Al despertar, bendigan su jornada, porque está ya desbordando de una abundancia de bienes que sus bendiciones harán aparecer. Porque bendecir significa reconocer el bien infinito que forma parte integrante de la trama misma del universo. Ese bien lo único que espera es una señal suya para poder manifestarse.
“Al cruzar con la gente por la calle, en el autobús, en su lugar de trabajo, bendigan a todos. La paz de su bendición será la compañera de su camino, y el aura de su discreto perfume será una luz en su itinerario. Bendigan a los que los encuentren, derramen la bendicion sobre su salud, su trabajo, su alegría, su relación con Dios, con ellos mismos y con los demás. Bendíganlos en sus bienes y en sus recursos. Bendíganlos de todas las formas imaginables, porque esas bendiciones no sólo esparcen las semillas de la curación, sino que algún día brotarán como otras tantas flores de gozo en los espacios áridos de su propia vida.
“Mientras pasean, bendigan su aldea o su ciudad, bendigan a los que la gobiernan y a sus educadores, a sus enfermeras y a sus barrenderos, a sus sacerdotes y a sus prostitutas. En cuanto alguien les muestre la menor agresividad, cólera o falta de bondad, respondan con una bendición silenciosa.Bendíganlos totalmente, sinceramente, gozosamente, porque esas bendiciones son un escudo que los protege de la ignorancia de sus maldades, y cambia de rumbo la flecha que les han disparado.
“Bendecir significa desear y querer incondicionalmente, totalmente y sin reserva alguna el bien ilimitado – para los demás y para los acontecimientos de la vida -, haciéndolo aflorar de las fuentes más profundas y más íntimas de su ser. Esto significa venerar y considerar con total admiración lo que es siempre un don del Creador, sean cuales fueren las apariencias. Quien sea afectado por su bendición es un ser privilegiado, consagrado, entero. Bendecir significa invocar la protección divina sobre alguien o sobre algo, pensar en él con profundo reconocimiento, evocarle con gratitud. Significa además llamar a la felicidad para que venga sobre él, dado que nosotros no somos nunca la fuente de la bendición, sino simplemente los testigos gozosos de la abundancia de la vida.
“Bendecirlo todo, bendecir a todos, sin discriminación alguna, es la forma suprema del don, porque aquellos a los que bendicen nunca sabrán de dónde vino aquel rayo de sol que rasgó de pronto las nubes de su cielo, y ustedes raras veces serán testigos de esa luz que ha iluminado su vida.
“Cuando en su jornada surja algún suceso inesperado que los desconcierte y eche por tierra sus planes, exploten en bendiciones, porque entonces la vida está a punto de enseñarles una lección, aunque su copa pueda parecerles amarga. Porque ese acontecimiento que creen tan indeseable, de hecho lo han suscitado ustedes mismos para aprender la lección que se les escaparía si vacilaran a la hora de bendecirlo. Las pruebas son otras tantas bendiciones ocultas. Y legiones de ángeles siguen sus huellas.
“Bendecir significa reconocer una belleza omnipresente, oculta a los ojos materiales. Es activar la ley universal de la atracción que, desde el fondo del universo, traerá a su vida exactamente lo que necesitan en el momento presente para crecer, avanzar y llenar la copa de su gozo.
“Cuando pasen por delante de una cárcel, derramen la bendición sobre sus habitantes, sobre su inocencia y su libertad, sobre su bondad, sobre la pureza de su esencia íntima, sobre su perdón incondicional. Porque sólo se puede ser prisionero de la imagen que uno tiene de sí mismo, y un hombre libre puede andar sin cadenas por el patio de una prisión, lo mismo que los ciudadanos de un país libre pueden ser reclusos cuando el miedo se acurruca en su pensamiento.
“Cuando pasen por delante de un hospital, bendigan a sus pacientes, derramen la bendición sobre la plenitud de su salud, porque incluso en su sufrimiento y en su enfermedad, esa plenitud está aguardando simplemente a ser descubierta. Y cuando vean a alguien que sufre y llora o que da muestras de sentirse destrozado por la vida, bendíganlo en su vitalidad y en su gozo: porque los sentidos sólo presentan el revés del esplendor y de la perfección últimas que sólo el ojo interior puede percibir.
“Es imposible bendecir y juzgar al mismo tiempo. Mantengan en sí mismos, por tanto, ese deseo de bendecir como una incesante resonancia interior y como una perpetua plegaria silenciosa, porque de ese modo serán de esas personas que son artesanos de la paz, y un día descubrirán por todas partes el rostro mismo de Dios.
“Posdata Y por encima de todo, no se olviden de bendecir a esa persona maravillosa, absolutamente bella en su verdadera naturaleza y tan digna de amor, que son ustedes mismos”.
Pierre Pradervand

viernes, 27 de enero de 2012

HILDEGARDA BURJAN

Un modelo de compromiso social
Hildegarda Burjan se convertirá, el próximo domingo, en la primera diputada elegida democráticamente Beata. Su lucha por la dignidad de la mujer en el Parlamento austríaco o en la sociedad civil, su obra como fundadora de las Hermanas de la Caridad Social y su testimonio como madre de familia cristiana son distintos aspectos de un mismo amor a Dios, que se encarna en la entrega a los demás


Un retrato de Hildegarda (Foto: © CS)
Hildegarda Burjan nació en 1883 en Görlitz (Alemania) en una familia judía secularizada. Joven inquieta, sus estudios despertaron en ella la pregunta acerca de Dios, pero su búsqueda, aunque apasionada, se limitaba al plano intelectual. En 1907, poco después de casarse con un joven también de origen judío, Hildegarda sufrió una grave enfermedad. Su curación, cuando ya los médicos la habían desahuciado, precipitó la conversión. Al poco tiempo, a punto estuvo de morir por complicaciones en el embarazo, pero se negó a abortar. Su salud quedó debilitada, al revés que su espíritu, forjado en la prueba. Y decidió entregarse a Dios en el servicio a los demás.
Eran tiempos marcados por la encíclica social Rerum novarum, de León XIII, e Hidelgarda se volcó en el trabajo con las trabajadoras a domicilio, sometidas a jornadas de 15 horas diarias con salarios de miseria. En 1912, fundó la Asociación de trabajadoras cristianas a domicilio. Agrupadas a modo de cooperativa, las mujeres conseguían mejores condiciones laborales, formación y protección en caso de embarazo o enfermedad. Pero, sobre todo, crecían en autoestima: «Con dinero y pequeñeces no se ayuda a una persona -explicó-. Se le debe volver a poner en pie y darle la convicción de ser alguien y poder hacer un servicio a los demás».
Tras la guerra, se dejó seducir por el Partido Socialcristiano, antecesor del actual Partido Popular de Austria. En el Parlamento promovió medidas de protección para madres y lactantes; impulsó la educación femenina y combatió la discriminación de la mujer. Gracias a sus planteamientos no ideologizados, supo forjar consensos. «El trabajo social significa superar las divisiones que surgen en la sociedad con amor cristiano y, con corazón compasivo, intentar tender puentes», decía.

Hildegarda Burjan, con su grupo parlamentario
del Parlamento austriaco (Foto: © CS)
En 1920, apenas dos años después, Hildegarda puso fin a su carrera política. La excusa fue su mala salud, pero el problema real era el antisemitismo, cada vez más extendido incluso dentro de su propio partido. Si calló sobre esto, fue para no dañar a amigos, especialmente a su mentor político, el sacerdote Ignaz Seipel, Canciller de la República entre 1922 y 1924, y 1926-1929. Pudo ahora centrarse en su gran proyecto: la fundación de una orden religiosa femenina volcada en el mundo de la exclusión social: Cáritas socialis. «¿Es posible ser a la vez Marta y María? Seguro que sí, y éste es el gran ideal que queremos lograr», afirmó. «No perder de vista la presencia de Dios a causa de ninguna actividad con los hombres: ése debe ser nuestro objetivo».
Las Hermanas de la Caridad Social se dedicaron a ayudar a prostitutas, mujeres sin techo... En 1924, pusieron en funcionamiento un albergue para madres solteras, obra pionera, muy criticada por quienes pensaron que así se promovía la inmoralidad.
Burjan murió en 1933, con apenas 50 años. Su proceso de beatificación se inició en 1963. En 2011, se aprobó un milagro atribuido a su intercesión: una mujer, estéril tras varias operaciones, tuvo tres hijos, después de encomendarse a ella.
El domingo se espera la presencia de una importante representación del Parlamento austríaco en la primera beatificación que va a acoger la catedral de San Esteban. «Se puede ser santo y político», ha destacado el cardenal Schönborn. Pero el arzobispo de Viena extrae de la futura Beata otra lección no menos importante: «No necesitamos teorías, sino testigos», dice el cardenal de una archidiócesis especialmente golpeada por la secularización, interna y externa.

ATEOS Y CREYENTES

¿Los ateos y los creyentes tenemos diferencias en el cerebro?

por Juanjo Romero

Cerebro de ateo y de creyente

Según Scientific American (o sea, uno de «los textos sagrados del ateo»), sí que las hay, aunque no han realizado el mapa neuronal completo.

Me ha hecho gracia. Me limito a transcribir. Recuerdan a Descartes postulando la glándula pineal «como el lugar del cuerpo donde se juntan cuerpo y alma». El racionalismo produce estas cosas.

Así que, como cuenta, Andrew Newberg, director de investigación en el Centro Myrna Brind de Medicina Integrativa de la Universidad y Hopital Thomas Jefferson de Filadelfia, podemos destacar las siguientes diferencias:

  • Las personas que rezan (en el texto dicen meditan, vaya Vd a saber qué entiende por eso) presentan más actividad y más tejido cerebral en los lóbulos frontales, regiones asociadas con la atención y la recompensa. No dicen cuanto, pero dicen que más que sus «congéneres» ateos.
  • Los «born again» tienen un hipocampo más pequeño, zona asociada a las emociones y la memoria. Más pequeño que los ateos en el artículo, no sé por qué comparan un «cristiano renacido» con un ateo.
  • Las personas que creen en Dios activan las mismas zonas que cuando lo hacen sobre realidades cercanas, es decir, que para un creyente Dios es real. Me ahorro el calificativo, ¡¡pedazo de descubrimiento!!
  • Alguno de los estudios también sugiere que en los creyentes hay mayor producción de dopamina. El experimento es curioso. Resulta que los creyentes son más propensos a detectar palabras o imágenes, aunque no fuesen figurasen en las pantallas, mientras que los ateos no las veían aunque sí figurasen. La situación se corregía si se les administraba dopamina sintética a los ateos.

En conclusión, que parece que hay diferencias pero no se sabe…, eso sí, Marx se equivocó de sustancia: «la religión es la dopamina del pueblo»

Y como siempre en estos casos: «¡reclamaciones al maestro armero!». A mi el estudio me parece una bobería, pero es lo que dice.

jueves, 26 de enero de 2012

¿DESPIERTO?



Creemos que estamos despiertos, pero ¿lo estamos? Quien da por sentado que "las cosas son así", ¿vive despierto o en su "sueño dogmático"?

miércoles, 25 de enero de 2012

OBRAS COMPLETAS DE BALTASAR GRACIAN

En tiempos de crisis e incertidumbre, resulta recomendable volver a clásicos como Baltasar Gracián. La editorial Cátedra presenta, en una extensa pero manejable edición de más de 1.600 páginas, sus Obras Completas, que se presentan, en particular, con un completo Glosario de léxico y usos gracianos. Se incluye la novela El Criticón, pero también ensayos y cartas con múltiples referencias valiosas incluso para comprender el momento político y económico actual. El sentido común y agudeza de este autor barroco hacen que merezca la pena el esfuerzo de una lectura no siempre fácil, pero que desde luego garantiza el enriquecimiento del lector.

viernes, 20 de enero de 2012

CAMINO CON CORAZON



Mira cada camino de cerca y con intención. Pruébalo tantas veces como consideres necesario. Luego hazte a ti mismo, y a ti solo, una pregunta. Es una pregunta que sólo se hace un hombre muy viejo… Te diré cual es: ¿Tiene corazón éste camino? Todos los caminos son lo mismo: no llevan a ninguna parte. Son caminos que van por el matorral. Puedo decir que en mi vida he recorrido caminos largos, largos, pero no estoy en ninguna parte. Si el camino tiene corazón es bueno; si no, de nada sirve. Ningún camino lleva a ninguna parte, pero uno tiene corazón y el otro no. Uno hace gozoso el viaje; mientras lo sigas, eres uno con él. El otro te hará maldecir tu vida. Uno te hace fuerte; el otro te debilita.

DON JUAN

viernes, 13 de enero de 2012

BUENOS LIBROS



Doña Mercedes Salisachs ha felicitado a sus amigos la celebración del Nacimiento del Señor con un precioso librito editado por la Clínica de la Universidad de Navarra, titulado Canto a la vida. Se abre con una cita de Juan Pablo II: «Amar es lo contrario de utilizar», y cuenta, en 70 páginas, la historia verídica de Laura, a la que, cuando iba a dar a luz a su hijo, le descubrieron un bulto sospechoso en el pecho. El primer ginecólogo al que acudió le dijo sin rodeos que tenía que abortar. El resto ya se lo imaginan ustedes: se negó en redondo, se fue a la clínica de la Universidad de Navarra, dio a luz felizmente a su hijo y se recupera de sucesivas operaciones de cáncer. Escribe: «A veces, los científicos se olvidan de que también ellos fueron fetos insignificantes. Y de que la vida es sólo un ensayo general para realizar lo que deberemos representar después de lo que llamamos muerte; una muerte anunciada desde que nacemos, hasta que las puertas de la verdadera vida se abren». Escribe muchas otras cosas maravillosas; por ejemplo que, «desde que el mundo se ha llenado de pequeños diosecillos que establecen leyes basadas en anarquías destructivas, matar es la forma más sensata y cómoda de librarnos de algo que puede convertirse en un problema». Al primer irresponsable ginecólogo que le dijo: «¡Pero si usted ya tiene tres hijos! ¿Para qué quiere tener otro?» Laura le corrigió: «No, doctor, yo ya tengo cuatro». Y escribe también que, a veces, los seres diferentes son mejores que los que intentan matarlos. Es un libro que deberían leer todas las madres que esperan; y también las que no esperan; y los padres también... O sea, todos.

Ahora que Benedicto XVI ha anunciado ya que la Iglesia conferirá a san Juan de Ávila el título de Doctor de la Iglesia, Juan Esquerda Bifet ha preparado, en la editorial Ciudad Nueva, con el título Me fío de Dios, una serie de textos antológicos de san Juan de Ávila insuperables para la meditación y la oración. El Patrono del clero secular, gran evangelizador y apóstol, resumía en esta frase la clave de su excelsa espiritualidad: «Demos nuestro todo, que es chico todo, por el gran todo, que es Dios».
Y en su colección Quince días con, un franciscano de pro, el cardenal Carlos Amigo Vallejo, arzobispo emérito de Sevilla, ha escrito una sucinta pero esencial biografía del itinerario espiritual de Francisco de Asís, figura siempre actual y fascinante. Con el poverello de Asís, uno aprende a no soslayar los problemas de la vida, sino a afrontarlos con una luz nueva. Francisco de Asís es el santo de la paz y la alegría, ciertamente, pero el lector se dará cuenta de que es también el santo que sabe llevar la Cruz con la nobleza y dignidad de una vida entregada en pobreza verdadera.

EL SECRETO DE FABIOLA Y BALDUINO


Reyes, escritores, políticos, músicos, científicos... recorren las páginas de 21 matrimonios que hicieron historia (ed. Rialp), de Gerardo Castillo. Son 21 reflejos distintos de amor humano en los que late lo divino, y todos ellos coinciden en haber permanecido unidos y felices, pese a las dificultades de la vida. El matrimonio de los reyes Balduino y Fabiola es uno de ellos. Ofrecemos unos párrafos significativos:


Balduino y Fabiola, reyes de Bélgica
En 1960, el rey Balduino I de Bélgica estaba soltero y sin compromiso. Los esfuerzos de su madrastra por buscarle novia no dieron resultado. Monseñor Suenens, entonces obispo auxiliar de Bruselas, le aconsejó que pidiera la ayuda de la Virgen en el santuario de Lourdes. Le sorprendió la respuesta del monarca: acababa de pasar toda la noche en oración ante la gruta de las apariciones, confiándole a la Virgen la solución del problema de su matrimonio. El rey quería una esposa que compartiera su fe. Suenens le sugirió entonces que se pusiera en contacto con una mujer irlandesa a la que había conocido en Lourdes. Se llamaba Verónica O´Brien y era promotora de la Legión de María. Balduino, en una entrevista que duró cinco horas, le confió a Verónica su preocupación por acertar en la elección de su esposa. Ella le invitó a buscar la solución en la católica España.
Verónica partió en secreto para Madrid. Un amigo aconsejó a Verónica entrevistarse con la directora de una prestigiosa escuela femenina de la ciudad, que le acompañó a visitar a una de sus antiguas alumnas; su nombre era Fabiola de Mora y Aragón.
Estímulo para amar a Dios
Tras conocer la gestión realizada, el rey pidió a Verónica que invitara a Fabiola a pasar unos días en Bruselas. Por fin, accedió a realizar el viaje, y se encontró en secreto con Balduino en la casa de Verónica. Antes de iniciarse el noviazgo, Fabiola acudió a Lourdes para confiar a la Virgen su decisión última. Unas semanas después, regresaría al santuario acompañada de Balduino. El 6 de junio de 1960, se vieron en Lourdes a las siete de la tarde. El rey relataría más tarde: «Después de una rápida presentación, nos adentramos los dos por un camino solitario. Durante cerca de tres horas intercambiamos nuestras impresiones sobre la situación. En pocos minutos, la amistad creció con la ayuda de Nuestra Señora para que, antes de separarnos el día 10, pudiéramos decirnos un el uno al otro».
Los días 7 y 8 volvieron a verse en la cripta, oyeron misa juntos y continuaron la conversación iniciada el primer día. Balduino confesará: «Lo que más me atrae de ella es su humildad, su confianza en la Santísima Virgen y su transparencia. Sé que será para mí un gran estímulo para amar a Dios cada día más». Finalmente, el 15 de septiembre contraen matrimonio en Bruselas.
Un corazón más libre
Entre 1961 y 1963, la reina sufre tres abortos. Ante 700 niños a los que recibe en el castillo de Laeken, Balduino afirma: «Nos hemos preguntado por el sentido de este sufrimiento; poco a poco hemos ido comprendiendo que nuestro corazón estaba así más libre para amar a todos los niños, absolutamente a todos».
En libro biográfico que escribió el cardenal Suenens, le pregunta a Balduino por el secreto de su matrimonio: «No hay que buscarlo lejos; reside en la profundidad de la vida espiritual. Dicho de otro modo, en la unión con Dios, vivida en cristiano, día a día, y traducida en gestos cotidianos de servicio a los demás».
Balduino renunció a sus funciones como Jefe de Estado, durante 44 horas, entre el 3 y el 5 de abril de 1990, al oponerse a la ley de despenalización del aborto, y evitar tener que sancionarla. Obró así porque esa ley atentaba contra el derecho a la vida y chocaba con sus creencias católicas. Corrió el riesgo de que el Parlamento no aprobase su regreso al poder.
Olvido de sí mismo
Balduino amaba a Fabiola no por amor de Dios, sino con el amor de Dios: «Casi todos los días veo en mi vida signos palpables del amor de Dios. Fabiola ha sido y sigue siendo uno de los más destacados. Algunas veces me he preguntado si todo esto no era demasiado maravilloso para ser verdad».
El 14 de diciembre de 1990, tras 30 años de matrimonio, la reina expresó sus sentimientos en un mensaje radiotelevisado: «Os diré simplemente que fueron años de felicidad, debidos por una parte a la amabilidad de mi marido, a sus atenciones, a un constante olvido de sí mismo que no faltó jamás. Ese olvido de sí a favor del otro es, de verdad, la clave de un matrimonio feliz. Pues amor y alegría es todo uno, lo cual no excluye el sufrimiento. El compartir las mismas pruebas consolida el amor».

jueves, 12 de enero de 2012

CRITICAR Y AGRADECER



TENEMOS MAS COSTUMBRE DE CRITICAR
QUE DE AGRADECER.

EL QUE AGRADECE ESTA MAS CERCA DE LA SABIDURIA
QUE EL SUPUESTO VIRTUOSO
QUE SE ERIGE EN JUEZ

EXTENDIO LA MANO



"Conmovido, Jesús extendió la mano y lo tocó"

Beata Teresa de Calcuta (1910-1997), Fundadora de las Hermanas Misioneras de la Caridad
Carta a sus colaboradoras del 10/04/1974

Los pobres tienen sed de agua, pero también de paz, de verdad y de justicia. Los pobres están desnudos y necesitan vestidos, pero también dignidad humana y compasión por los pecadores. Los pobres no tienen hogar y necesitan un refugio hecho ladrillos, pero también un corazón alegre, compasivo y lleno de amor. Están enfermos y necesitan atención médica, pero también una mano caritativa y una sonrisa acogedora.
Los excluidos, los que son rechazados, aquellos que no son amados, los presos, los alcohólicos, los moribundos, los que están solos y abandonados, los marginados, los intocables y los leprosos..., los que viven en la duda y la confusión, los que no han sido tocados por la luz del Cristo, los hambrientos de la palabra y de la paz de Dios, las almas tristes y afligidas..., los que son una carga para la sociedad, que han perdido toda esperanza y fe en la vida, los que olvidaron cómo sonreír y los que no saben lo que es recibir un poco de calor humano, un gesto de amor y de amistad - todos ellos, se vuelven hacia nosotros para recibir un poco de consuelo. Si les damos la espalda, damos la espalda a Cristo.

miércoles, 11 de enero de 2012




NO CREAS QUE ALCANZARÁS LA VERDAD
ACUMULANDO CONOCIMIENTOS.
EL CONOCIMIENTO ENGENDRA LA DUDA
Y LA DUDA TE HACE TENER HAMBRE DE
MAS CONOCIMIENTOS.
EL AMOR TE CONDUCE AL CONOCIMIENTO
Y DIFICIFICILMENTE SUCEDE LO CONTRARIO

DOS AMIGOS


Dice una leyenda árabe que dos amigos viajaban por el desierto. En un determinado punto del viaje discutieron, y uno le dio una bofetada al otro. El otro, ofendido, sin nada que decir, escribió en la arena: HOY, MI MEJOR AMIGO ME PEGO UNA BOFETADA EN EL ROSTRO.

Siguieron adelante y llegaron a un oasis donde resolvieron bañarse. El que había sido abofeteado y lastimado comenzó a ahogarse, siendo salvado por el amigo. Al recuperarse tomo un estilete escribió en una piedra: HOY, MI MEJOR AMIGO ME SALVO LA VIDA.

Intrigado, el amigo preguntó: ¿Por qué después que te lastimé, escribiste en la arena y ahora escribes en una piedra?

Sonriendo, el otro amigo respondió: "Cuando un gran amigo nos ofende, deberemos escribir en la arena donde el viento del olvido y el perdón se encargaran de borrarlo y apagarlo; por otro lado cuando nos pase algo grandioso, deberemos grabarlo en la piedra de la memoria del corazóndonde viento ninguno en todo el mundo podrá borrarlo".